Los tejidos elásticos
Hay tejidos que tiene la particularidad de ceder, de estirarse cuando reciben presión.
Ello es debido a la forma de ser tejidos y/o a la composición de los hilos de trama y/o urdimbre.
Por lo que nos interesa en este post diremos que la elongación, puede darse en uno o dos sentidos: en sentido vertical o urdimbre y/o sentido horizontal o trama.
Para cortar un patrón en un tejido elástico deberemos hacer una serie de transformaciones, de ello precisamente nos ocuparemos en este post.
Imaginemos una tela elástica de un solo sentido.
Si la dejamos en reposo, un retal encima de la mesa de corte el entramado de la tela estará cerrado.
Si tiramos por el lado de la elasticidad de esta tela veremos cómo los hilos elásticos ceden mientras que los hilos no elásticos quedan en la misma posición.
Más estiraremos y los hilos elásticos cederán más mientras que los hilos no elásticos quedarán igual.
En la próxima ilustración mostramos la misma tela en tres posiciones. En la imagen superior la tela está sin tensión, en la segunda hemos aplicado una tensión suficiente para que se desarrolle de la mitad de su ancho y en la tercera hemos dado una tensión suficiente para que se desarrolle el doble de su ancho.
Por ello, si consideramos que la primera tela está a 100%, la segunda estará a un 150% (o sea el ancho original: 100, más la mitad 50 serán 150%) y en la tercera estará en una tensión del 200% (o sea que habrá cedido el doble del acho en reposo)
La tensión real infringida en la tela será en el primer caso de 0% (100-100), en el segundo de un 50% (150-100) y en el tercer caso de un 100% (200-100)
No debemos utilizar toda la elasticidad de la tela por varias razones:
Primero porque la el tejido elástico si lo utilizamos en su máxima utilidad será lo mismo que si utilizamos un tejido no elástico. Imaginemos que hacemos una malla en tejido elástico y lo utilizamos forzándolo a la mayor tensión: la persona que llevaría esta malla no podría caminar porque la tela no cedería más.
Por otra parte como hemos explicado más arriba los hilos elásticos al tener tensión ceden pero no crecen, es más, disminuyen su volumen por lo que los espacios que queda entre los hilos son mayores y aumenta la transparencia.
En la siguiente ilustración (en la que no hemos adelgazado los hilos elásticos pero si hemos colocado los hilos verticales, en nuestro ejemplo no elásticos, proporcionalmente al incremento de volumen) vemos las mismas imágenes que en la ilustración anterior, detrás de ellos hemos puesto una manzana.
Vemos en la primera imagen que la manzana apenas se intuye ya que la malla está cerrada, en la segunda y la tercera vemos claramente la manzana a través de la tela).
Cómo determinar el valor de tensión de una tela elástica.
El próximo punto es el de determinar la elasticidad que queremos utilizar.
Siguiendo con nuestro ejemplo de una tela elástica en un único sentido, mediremos un trozo de tela por ejemplo 20 centímetros, estiraremos de lado y lado de estos 20 centímetros (claro está en el sentido elástico) hasta saber la tensión que nos conviene.
Imaginemos que decidimos que la máxima elasticidad que queremos utilizar es estirando la tela hasta que se convierte en 24 centímetros, de los 20 centímetros hasta los 24 hemos aumentado el volumen de la tela original de un 20% por lo que la tensión aplicada será de un 20 %.
Si la tela cede hasta un 40% para alcanzar su elasticidad máxima sabemos que tendremos otro 20% más de elasticidad de la tela.
Cómo cortar un patrón para tela elástica.
Siguiendo el ejemplo de una tela de una única elasticidad procederemos de la siguiente forma:
El sentido de la elasticidad, si sólo tiene un sentido elástico, siempre lo pondremos en el eje horizontal, o sea en el sentido de las líneas de cintura, cadera, pecho, de las medidas que nos marcan los contornos.
Todas las medidas horizontales las reduciremos del tanto por ciento de la tensión que queramos infringir a la tela.
Por ejemplo en el caso de una tela de gran elasticidad podremos sacar un 20% de todas las medidas horizontales, o lo que es lo mismo multiplicar por 0.8.
Para encontrar el número multiplicador será suficiente encontrar primero la porcentual de tensión, esta restarla de 100 y dividir el resultado por 100. Por ejemplo si tenemos una tela de tensión 10% haremos el siguiente cálculo: (100-10)/100 = 0.9
Una vez modificados los contornos podremos cortar los patrones normalmente. Si en algún caso hacemos una proporción en el que incluyamos un valor fijo , por ejemplo un cuarto de cadera más 1 cm , los valores fijos deberemos también multiplicarlos por el conversor que hemos encontrado en el párrafo anterior.
Forma de convertir un patrón de tela plana en tela elástica
Para convertir un patrón de tela plana en tela elástica lo más práctico será gradar o escalar el patrón de tela plana con una gradación horizontal cuya ratio constante para todos los puntos del patrón será el tanto por ciento de la tensión que hayamos aplicado.
Observaciones a la hora de convertir un patrón de tela plana a elástica o a la hora de cortar un patrón en tela elástica.
Evitaremos las pinzas en toda prenda que sea cortada o patronada para una tela elástica.
Cuando cosemos una pinza, al re-puntear los labios de ésta, quitamos la elasticidad de la tela, al llegar a la punta de la pinza, aunque no aparezca un “culo de pollo” (como se llama en nuestra jerga) en el vértice, lo hará inevitablemente cuando pongamos en tensión la costura porque los hilos elásticos inmediatamente superiores a la punta de la pinza repartirán de forma diferente su elasticidad que los hilos que hemos pillado en los labios de la pinza.
Para evitar las pinzas en las prendas elásticas podemos hacer dos cosas:
1.- Pasar de ellas, en el caso en que la pinza sea pequeña y pueda absorberla el resto de elasticidad que no hemos utilizado.
2.- En el caso en que no podamos obviar la pinza abriremos costura.
Muy parecido al problema de las pinzas será el de los trazados con mucha forma, por ejemplo la forma del seno en un corte de copa tipo sujetador o bien en una cazuela genital, en tales casos será interesante mitigar las líneas por la misma razón que hemos explicado de las pinzas, sobretodo porque en estas costuras de tipo circular entran también en juego el bies que formarán los hilos de urdimbre.
Los tejidos de doble elasticidad.
En el caso de contar con un tejido de doble elasticidad, vale lo que hemos dicho para las líneas horizontales. Las líneas verticales las consideraremos de la misma forma que las líneas horizontales, por lo que sólo será cuestión de duplicar todo lo dicho en sentido vertical.
Observaciones para los tejidos de doble elasticidad
Nos remitimos a todas las mismas precauciones que hemos advertido más arriba para los tejidos horizontales, además debemos tener en cuenta que:
1.- Las dos elasticidades pueden o no ser iguales por lo que deberemos hacer el cálculo de tensión en ambas direcciones. Por otro lado aunque la tela tuviera la misma elasticidad en ambos sentidos nosotros podríamos decidir de utilizar tensiones diferentes en el sentido vertical u horizontal
2.- Si la tela no la ponemos en tensión se comportará como una tela plana. Imaginemos que cortamos unos pantalones con una tela elástica en dos direcciones y que las perneras de los pantalones son anchas. Si aplicamos el tanto por ciento de la tensión calculada una vez cortado y confeccionado el pantalón de cintura hasta entrepierna funcionará perfectamente pero nos quedará corto el bajo.
Desde la línea de entrepierna hasta el bajo, si la pernera es ancha nada dará tensión a la tela para que se estire por lo que si hemos quitado el porcentaje en las perneras enteras, pongamos sobre unos 65 cm, los pantalones una vez montados quedarán un 20% de 65 más cortos de lo que esperamos (unos 13 centímetros)…. Habremos convertido los pantalones en piratas.
En los próximos post veremos cómo transformar patrones de tela plana en patrones de tela elástica mediante la gradación y cómo patronar directamente en base a los valores de tensión de las telas que dispongamos.