Narciso

Oscar Wilde gran esteta y dandi escribió un delicioso poema en prosa llamado el discípulo que me permito publicar en este blog.

“Cuando Narciso murió, el río de sus delicias se transformó de una copa de agua dulce en una copa de lágrimas saladas, y las Oréades* vinieron llorando por los bosques a cantar junto al río y a consolarle.

Y cuando vieron que el río habíase convertido de copa de agua dulce en copa de lágrimas saladas deshicieron los bucles verdes en sus cabelleras. Y gritaban al río y le decían:

-No nos extraña que le llores así. ¿Cómo no ibas a amar a Narciso con lo bello que era?

-¿Pero Narciso era bello?

-¿Quién mejor que tú puede saberlo? -respondieron las Oréades- Nos despreciaba a nosotras, pero te cortejaba a ti, e inclinado sobre tus orillas, dejaba reposar sus ojos sobre ti, y contemplaba su belleza en el espejo de tus aguas.

Y el río contestó:

-Si amaba yo a Narciso, era porque, cuando inclinado en mis orillas, dejaba reposar sus ojos sobre mí, yo veía reflejada mi propia belleza en el espejo de sus ojos.”

*Las oréades eran ninfas que custodian y protegen  las grutas y las montañas.

En este post hablaremos de narcisismo.

Como en el post de Blancanieves, aquí el espejo de las aguas del río son la consciencia social.

Empezaremos por el final del poema, el río dice: Yo amaba Narciso (el creador de moda), cuando inclinado en mis orillas (cuando estaba a mis servicio),  dejaba reposar sus ojos sobre mí (me amaba), yo veía reflejada mi propia belleza en el espejo de sus ojos (y yo identificaba mi belleza con la suya).

Hay tres características fundamentales para el verdadero creador de moda:

1.- que esté al servicio de la sociedad para la que crea.

2.- que esté enamorado de la gente (abstractamente) que ha de vestir.

3.- que la gente se identifique con él.

Estar al servicio de la sociedad a la que viste quiere decir que conoce cada uno de los problemas de la gente que compone el ámbito social al que quiere llegar. Debe conocer cómo vive, qué ansía, y la capacidad económica cuantificada en esfuerzos para llegar a obtener lo que se le propone.

Debe estar enamorado de la gente, debe ser una relación “ego-alteri” y no “ego-ego”: La persona que se ama sólo a sí misma sólo puede llegar a mal-vestirse ella misma. La indumentaria como ya discutimos en el segundo post no es más que una segunda piel que oculta lo que realmente somos. Esta segunda piel será nuestra tarjeta de presentación y sólo se puede decir algo si se tiene algo que decir y sólo podemos decir algo si tenemos al menos un elemento de comparación: narciso podía ser bello pero de nada le servía si él no era consciente de cómo eran los demás: jamás hubiera podido dar un consejo, jamás pudo hacer otra cosa que la auto-contemplación.

Choca la respuesta del río porque es inesperada, ante la falta de identidad de Narciso gozaba de verse reflejado en sus pupilas sin ver la belleza del efebo. No fue más para el río que la camiseta blanca  comprada en el mercadillo para los días que no tenemos que salir de casa y que cuesta barata.

¿Qué es un enamoramiento abstracto?

La palabra “abstracto” la define el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española en su primera acepción “alguna cualidad con exclusión del sujeto”.

“Enamoramiento” siempre la misma fuente nos lo define como “ acción y defecto de enamorar o enamorarse”

“Enamorar” y “enamorarse” lo define en su cuarta acepción en ambos casos como ”Aficionarse a algo”.

De ende, el “enamoramiento abstracto de la sociedad a la que se quiere vestir” seria  “el aficionarse a la sociedad que se quiere vestir con exclusión de la propia persona”, por mucho que las Oréades lloraran  a nadie le importó sustancialmente que el bello Narciso muriera ya que el sólo estaba aficionado a su propio reflejo.

¿Cómo un creador puede excluir su propia persona y como puede afeccionarse más a los otros cuerpos que al suyo?

 Continuará…. Me vence el sueño.